Biblia Jubileo 2000 1Y cuando partiereis por suertes la tierra en heredad, apartaréis una suerte para el SEÑOR que le consagraréis de la tierra, de longitud de veinticinco mil cañas de medir y diez mil de ancho; esto será santificado en todo su término alrededor.
2De esto serán para el Santuario quinientas de longitud, y quinientas de ancho, en cuadro alrededor; y cincuenta codos en derredor para sus ejidos.
3Y de esta medida medirás en longitud veinticinco mil cañas, y en anchura diez mil, en lo cual estará el Santuario, el Lugar Santísimo.
4Lo consagrado de esta tierra será para los sacerdotes ministros del Santuario, que son escogidos para ministrar al SEÑOR; y les será lugar para casas, y Lugar Santo para el Santuario.
5Y otras veinticinco mil de longitud, y diez mil de anchura, lo cual será para los levitas ministros de la Casa, en posesión, con veinte cámaras. 6Y para la posesión de la ciudad daréis cinco mil de anchura y veinticinco mil de longitud, delante de lo que se apartó para el Santuario; esto será para toda la Casa de Israel. 7Y la parte del Príncipe será junto al apartamiento del Santuario, de una parte y de la otra, y junto a la posesión de la ciudad, delante del apartamiento del Santuario, y delante de la posesión de la ciudad, desde el rincón occidental que está hacia el occidente, hasta el rincón oriental que está hacia el oriente; y la longitud será de una parte a la otra, desde el rincón del occidente hasta el rincón del oriente. 8Esta tierra tendrá por posesión en Israel, y nunca más mis príncipes oprimirán a mi pueblo; mas darán la tierra a la Casa de Israel por sus tribus. 9Así dijo el Señor DIOS: Basta ya, oh príncipes de Israel; quitad la violencia y la rapiña; haced juicio y justicia; quitad vuestras imposiciones de sobre mi pueblo, dijo el Señor DIOS. 10Peso de justicia, y efa de justicia, y bato de justicia, tendréis. 11El efa y el bato serán de una misma medida; que el bato tenga la décima parte del homer, y la décima parte del homer el efa; la medida de ellos será según el homer. 12Y el siclo será de veinte geras: veinte siclos, con veinticinco siclos, y quince siclos, os serán una mina. 13Esta será la ofrenda que ofreceréis: la sexta parte de un efa de homer del trigo, y la sexta parte de un efa de homer de la cebada. 14Y la ordenanza del aceite será que ofreceréis un bato de aceite, que es la décima parte de un coro: diez batos harán un homer; porque diez batos son un homer. 15Y una cordera de la manada de doscientas, de las gruesas de Israel, para sacrificio, y para holocausto y para pacíficos, para ser reconciliados, dijo el Señor DIOS. 16Todo el pueblo de la tierra será obligado a esta ofrenda para el príncipe de Israel. 17Mas del príncipe será la obligación de dar el holocausto, y el sacrificio, y la libación, en las solemnidades, y en las lunas nuevas, y en los sábados, y en todas las fiestas de la Casa de Israel; él ofrecerá el pecado, el presente, el holocausto, y los pacíficos, para reconciliar la Casa de Israel. 18Así dijo el Señor DIOS: El mes primero, al primero del mes, tomarás un becerro, hijo de vaca, sin defecto, y removerás el pecado del Santuario. 19Y el sacerdote tomará de la sangre del pecado, y pondrá sobre los postes de la Casa, y sobre los cuatro ángulos del patio del altar, y sobre los postes de las puertas del atrio de adentro. 20Así harás hasta el séptimo día del mes por los errados y engañados; y reconciliarás la Casa. 21El mes primero, a los catorce días del mes, tendréis la pascua, que será fiesta de siete días; se comerá pan sin levadura. 22Y aquel día el príncipe sacrificará por sí, y por todo el pueblo de la tierra, un becerro como pecado. 23Y en todos los siete días de solemnidad hará holocausto al SEÑOR, siete becerros y siete carneros sin defecto, cada día de los siete días; y como pecado un macho cabrío cada día. 24Y con cada becerro ofrecerá Presente de un efa de flor de harina, y con cada carnero otro efa; y por cada efa un hin de aceite. 25En el mes séptimo, a los quince del mes, en la fiesta, ofrecerá otra vez como en estos siete días, el pecado, el holocausto, el presente, y el aceite. |