Biblia Jubileo 2000 1Al mes tercero de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, en aquel día vinieron al desierto de Sinaí.
2Porque partieron de Refidim, y llegaron al desierto de Sinaí, y se asentaron en el desierto; y acampó allí Israel delante del monte.
3Y Moisés subió a encontrarse con Dios; y el SEÑOR lo llamó desde el monte, diciendo: Así dirás a la Casa de Jacob, y denunciarás a los hijos de Israel:
4Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas, y os he traído a mí.
5Ahora pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.
6Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel. 7Entonces vino Moisés, y llamó a los ancianos del pueblo, y propuso en presencia de ellos todas estas palabras que el SEÑOR le había mandado. 8Y todo el pueblo respondió a una, y dijeron: Todo lo que el SEÑOR ha dicho haremos. Y Moisés refirió las palabras del pueblo al SEÑOR. 9Y el SEÑOR dijo a Moisés: He aquí, yo vengo a ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga mientras yo hablo contigo, y también para que te crean para siempre. Y Moisés denunció las palabras del pueblo al SEÑOR. 10Y el SEÑOR dijo a Moisés: Ve al pueblo, y santifícalos hoy y mañana, y laven sus vestidos; 11y estén apercibidos para el día tercero, porque al tercer día el SEÑOR descenderá, a ojos de todo el pueblo, sobre el monte de Sinaí. 12Y señalarás término al pueblo en derredor, diciendo: Guardaos, no subáis al monte, ni toquéis a su término; cualquiera que tocare el monte, de seguro morirá. 13No le tocará mano, porque será apedreado o asaeteado; sea animal o sea hombre, no vivirá. Cuando hubiere sonado largamente el jubileo, subirán al monte. 14Y descendió Moisés del monte al pueblo, y santificó al pueblo; y lavaron sus vestidos. 15Y dijo al pueblo: Estad apercibidos para el tercer día; no lleguéis a mujer. 16Y aconteció al tercer día cuando vino la mañana, que vinieron truenos y relámpagos, y espesa nube sobre el monte, y un sonido del shofar (trompeta de cuerno de carnero) muy fuerte; y se estremeció todo el pueblo que estaba en el campamento. 17Y Moisés sacó del campamento al pueblo a recibir a Dios; y se pusieron a lo bajo del monte. 18Y todo el monte de Sinaí humeaba, porque el SEÑOR había descendido sobre él en fuego; y el humo de él subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremeció en gran manera. 19Y el sonido del shofar iba esforzándose en extremo: Moisés hablaba, y Dios le respondía en voz. 20Y descendió el SEÑOR sobre el monte de Sinaí, sobre la cumbre del monte; y llamó el SEÑOR a Moisés a la cumbre del monte, y Moisés subió. 21Y el SEÑOR dijo a Moisés: Desciende, requiere al pueblo que no traspasen el término para ver al SEÑOR, porque caerá multitud de ellos. 22Y también los sacerdotes que se acercan al SEÑOR, se santifiquen, para que el SEÑOR no haga en ellos estrago. 23Y Moisés dijo al SEÑOR: El pueblo no podrá subir al monte de Sinaí, porque tú nos has requerido diciendo: Señala términos al monte, y santifícalo. 24Y el SEÑOR le dijo: Ve, desciende, y subirás tú, y Aarón contigo; mas los sacerdotes y el pueblo no traspasen el término para subir al SEÑOR, para que no haga entre ellos estrago. 25Entonces Moisés descendió al pueblo y habló con ellos. |